sábado, 13 de junio de 2009

BIOTECNOLOGÍA AGRICOLA:

BIOTECNOLOGÍA AGRICOLA: ¿nuevo Freinkeinstein?

La evolución esta en marcha o ¿acaso fuera de control?


Por Madelaine Opitz

3er año de periodismo

Universidad Austral de Chile



Será que el mundo se ha convertido en una granja del “doctor Frankeinstein”, donde organismos genéticamente modificados (OGM) son sembrados y hoy cobran vida en nuestros campos. Solucionando de esta forma problemas de abastecimiento alimentario. O los ambientalistas exageran, y estas son las semillas y plantas del futuro, que vendrán a coexistir con nuestra ya “empobrecida” biodiversidad.

Semillas transgénicas moviéndose por el mundo como el mounstro del doctor freinkeistein. Libres, ¿pero con hambre de venganza? ¿Puede algún día el invento ir en contra de su creador?, o los ambientalistas y ONGs tienen un discurso apocalíptico y estas serán las semillas y plantas del futuro que alimentaran ha este nuevo ser humano modificado.

Son muchas las interrogantes. Las semillas fueron liberadas al mundo, ¿hay que hacer algo? … o dejar simplemente que nuestra tecnología que permite la manipulación biológica, siga su curso… Y confiar en que las trasnacionales no harán daño al ser humano y su medioambiente.

¿Hagamos un poquito de historia? La intervención del ser humano en la mejora de los cultivos, árboles, ganado y pesca no es una novedad. Desde hace milenios, las especies más productivas, mejor adaptadas o de particular utilidad, han sido objeto de mejoramiento, cruzamiento y selección. Remontémonos a los comienzos de la agricultura desde que los seres humanos se hicieron sedentarios y comenzaron a practicarla, hace más de 8 000 años, han venido seleccionando los cultivos que producen, tomándolos primero del mundo silvestre y domesticándolos después a través de la agricultura. Y no sólo se elegían las plantas que prosperaban, sino también las que mostraban mayor resistencia a las variaciones del clima, a las plagas y a las enfermedades. Las poblaciones de plantas escogidas por estos agricultores hoy forman la base de los cultivos alimentarios del mundo. ¿No es esto biotecnología agrícola?

He visto también a mi abuelita hacer injertos de árboles, cruzando dos especies diferentes para crear una nueva ¿organismo genéticamente modificado?

Antes de todo aclaremos un par de detalles, ¿Cómo se define la biotecnología?

Se entiende por biotecnología toda técnica que utiliza organismos vivos o sustancias obtenidas de esos organismos para crear o modificar un producto con fines prácticos. La biotecnología puede aplicarse a todo tipo de organismos, desde los virus y las bacterias a los animales y las plantas, y se está convirtiendo en un elemento importante de la medicina, la agricultura y la industria modernas. La biotecnología agrícola moderna comprende una variedad de instrumentos que emplean los científicos para comprender y manipular la estructura genética de organismos que han de ser utilizados en la producción o elaboración de productos agrícolas.

¿Y cual es la diferencia entre un transgénico y un (OGM)?

Todos los transgénicos son Organismos Genéticamente Modificados, pero no todos los OGM son transgénicos. Un transgénico es un organismo de una especie al cual se le ha insertado uno o varios genes de otra(s) especie(s). Un OGM es cualquier ser vivo al cual se le haya modificado su genoma, sin agregarle secuencias genéticas de un organismo de otra especie...

¿Donde esta el problema entonces?

El agrónomo y sociólogo de la Universidad Austral, Gustavo Blanco, afirma que “modificaciones genéticas han ocurrido a lo lardo de nuestra historia agrícola. Pero que el problema radica justamente en los transgénicos, porque hemos llegado a tal desarrollo tecnológico en la manipulación biológica, que somos capaces de controlar la vida, haciendo una obra comparable al trabajo de la naturaleza” asegura

Blanco, afirma que “hay que mirar la biotecnología teniendo un poco de perspectiva, esta es una época con una tendencia de cambio general, y estos se generan de manera muy acelerada, por lo que muchas veces se limita el tiempo de análisis”.

Asegura que “las ONGs, transnacionales, y científicos tienen un discurso marcado por intereses propios. Por lo que hay que ampliar la mirada, y no ver todo de color blanco o negro” asegura

En la misma línea el sociólogo estudioso de la biotecnología Jubel Moraga, no ve en esta un peligro para la humanidad, sino en la transgénesis, esto de trasladar genes de una especie a otra haciendo híbridos de resultados desconocidos con la interacción con el medio ambiente. “Estamos creando por ejemplo tomates con genes de cerdo, y no sabemos que consecuencias traerán para la biodiversidad y el ser humano en el largo plazo”asegura.

¿Donde comenzó el riesgo? en la década del 70 donde compañías de Estados Unidos y Alemania adquirieron la propiedad de este nuevo producto genético. “aquí hay un cambio súper potente porque solo se patentaban cosas inanimadas hasta esa época, de ahí en adelante también se incluyen los animados, se patento la vida”. Moraga

¿Qué almacena el misterio?

Las semillas transgénicas, creadas por corporaciones globales de agronegocios, donde destacan Monsanto, Dupont, Syngenta, Bayer, Dow y Basf. Controlan de esta forma el mercado mundial de semillas transgénicas y sus patentes. Blanco asegura que de esta forma están “tornando ilegales los derechos ancestrales de los campesinos y campesinas a guardar y replantar semillas. Ha esto se suma la presión por parte de estas empresas de ocupar la tecnología “Terminator” para hacer semillas suicidas; logrando semillas estériles en segunda generación y de esta forma automáticamente obligan ha todos a comprar semillas nuevas cada siembra. Esta dependencia con las semillas comerciales es lo que obliga a los agricultores a seguir comprando semillas transgénicas. Blanco sostiene que las semillas transgénicas tienen un rendimiento en la producción del 10 al 12% lo que las hace muy rentables para las empresas agrícolas, que trabajan sus siembras en grandes volúmenes. Mirando solo de esta forma el lado económico, no contemplando el posible daño medioambiental porque, “se comprobó a nivel mundial que los cultivos transgénicos tenían la capacidad de contaminar siembras y vegetación silvestre aledaña, al encontrar trazas de estos genes en dichos organismos” afirmo el agrónomo

En los países del Sur, existen 1400 millones de campesinos que usan sus propias semillas para producir alimentos y forrajes. Con la introducción de transgénicos (Terminator), se están amenazando sus formas de vida. ¿Desaparecerán los pequeños agricultores? ¿Es posible la coexistencia de los cultivos tradicionales con los modificados genéticamente? ¿Esta en peligro la soberanía alimentaría en manos de las transnacionales?

Gustavo Blanco no ve la desaparición de los pequeños agricultores “veo lo de los cultivos modificados, como una ventaja para ellos, porque al no estar conectados al circuito comercial lo que hacen es mantener sus semillas. Muy pocos pequeños agricultores, están en condiciones de comprar estas semillas, con todo el paquete tecnológico asociado que contempla fertilizantes y plaguicidas fabricados para el cultivo”.enfatizó

“en unos años mas va a tener más valor, la biodiversidad. Y los campesinos que cuiden estos bolsones van a ver los beneficios, porque para algunas ONGs, la situación se puede revertir y en unos años más las grandes empresas semilleras van a tener que pagar a los pequeños agricultores por la biodiversidad, como hoy lo hacen estos a las trasnacionales cuando ven algunos de sus predios con trazas de sus genes, por lo que los demandan por uso ilegal de genes patentados, viéndose obligados a pagar indemnizaciones” aseguró

Para Blanco, las Semillas son la clave de la cadena alimentaría, quien las posea tiene la llave de la cadena alimentaría. “Que demanden a los agricultores que no optaron por esta tecnología, y que vieron sus predios contaminados, por apropiación ilegal, los hace perder justamente el control del proceso productivo sin haberlo elegido”enfatizó. Parte fundamental de las semillas, por lo que hoy vemos a través de distintos movimientos ciudadanos y de ONGs una respuesta “a decir momento esto no puede transformar se en un monopolio, el proceso de producción de alimentos tiene que tener una base democrática, que este sustentada en la posibilidad de los agricultores de producir sus propias semillas y eso tiene que ser un derecho garantizado, lo que significa generar políticas de protección para proteger la biodiversidad. Hay un contramovimiento importante que no esta permitiendo un avance explosivo de estas siembras, lo que nos permite analizar mas profundamente el tema” recalcó

Para el sociólogo Jubel Moraga “la preocupación por la biodiversidad llegó muy tarde, y hoy se ve imposible revertir la situación. La biodiversidad se ha visto tan dañada no solo de esta forma, sino que también a través de la contaminación” esta desapareciendo flora silvestre, en los bancos genéticos se mezclan las especies y se logra nuevas vidas, “pequeños freinkeistein”, que asumen vida propia y que en cualquier minuto no lo tienen claro ni siquiera los científicos, se pueden volver contra su creador” recalcó Moraga

¿Los políticos saben de esto?

Se creo la tecnología Terminador, para frenar el avance de la contaminación transgénica. Un buen motivo si hacemos un análisis superficial, pero será capaz está tecnología de frenar el avance de estos nuevos genes por las praderas del mundo. ¿Y si fallara? Y se comenzara a contaminar la agricultura convencional y la flora de nuestro planeta, que ya ocurrido, pero esta vez de manera masiva. Las ONGs apuestas por los peligros a los cuales estamos sometiendo a nuestra desgastada biodiversidad, mientras las transnacionales ven en esta forma de hacer agricultura 0 riesgos, lo que permitiría la elección del agricultor, no habiendo problemas con la soberanía alimentaría.

En Chile el debate está recién comenzando, este año se discute en el senado la extensión de los cultivos transgénicos ya que nuestro país es solo exportador de semillas modificadas, no incluyendo en la discusión la rotulación de estos productos. Paralelamente en mayo de este año fuimos testigos de la aparición de trazas de estos genes en cuatro cultivos aledaños a un semillero de (OGM), en la región de O”higgins. ¿Cuáles son las políticas y lineamientos, que controlan estos cultivos en Chile? No existen, porque se opto por incorporarlos y luego legislar ¿los honorables leen revistas científicas?, han investigado el porque los países desarrollados con sus multinacionales prefieren países en vías de desarrollo para sus graneros transgénicos. ¿Nos utilizarán como sus conejillos de indias?...Y los honorables tal véz después dirán, “es que yo no sabia, nadie me informo”.


Para el Seremi de agricultura de la región de los ríos Javier Parra Solís, político y agrónomo los transgénicos son un tema semi-conocido, que se comprometió a estudiar más detenidamente después de nuestra conversación. En un ejercicio de futurología, lo invite ha imaginar la posibilidad que la incorporación de estos cultivos, perjudique a los pequeños agriculturas y favorezca a los grandes empresarios agrícolas. ¿Por quien tomaría parte el gobierno, en un contexto de un mundo capitalista, pero con un estado que cuida el bien común? “El estado no es un regulador del bien común, no podemos volver al pasado, ha un estado excesivamente proteccionista. Hoy el mercado regula todo, nosotros somos un puente entre los privados. Pero independiente de esto el gobierno siempre trabaja para que las medidas que se tomen beneficien a todos, nunca vamos a permitir que se perjudique a algunos de los sectores”. Reafirmó el Seremi de agricultura

Respecto a la rotulación de los productos trangénicos, no lo estimo un punto trascendental “es que no es necesaria porque desde hace muchos años los consumimos, no cambiaria para nada la situación. Las empresas piensan por los consumidores, ellas saben lo que nosotros queremos y necesitamos” recalcó

Rebusque con desesperación en mi mente la duda que no tenia respuesta, pregunta que haría encender el debate en la región de los ríos ¿existen cultivos transgénicos en la región?

No lo se. Me afirmó. Y vi tal grado de seguridad en sus palabras, que le creí.

La decisión esta en manos de los consumidores, siempre y cuando no se oculte información. La biotecnología no es el fin del mundo, pero si augura cambios importantes que van a cambiar de cierta forma los destinos de la naturaleza y del ser humano, para algunos transformándose en el cielo, y para otros en el infierno.

Este pequeño fnkeistein, que planteaba Gustavo Blanco, que parece ser bueno…Pero ¿acabara siendo un mounstro ingobernable, que ira mucho más allá de su origen?


No lo sabemos hoy, pero tal vez nuestros hijos y nietos lo vivan…


2 comentarios:

Anónimo dijo...

mi opinión al respecto es que los trangenicos tiene un lado bueno y uno malo -como se indica en el articulo- si bien atentan con al biodeversidad, en práctica resultan muy buenos para ciertos propositos, hay especies trangenicas, que son resistentes a hervicidas, lo que a la hora de hacer alguna aplicación de un producto nos confiere una ventaja frente a aquellas que son suceptibles. Si vemos las cosas con ojos de dinero y economía, los OGM han revolucionado el sistema ne las ultimas décadas, pero no es despeciable el inpácto medioambiental que genera. Por lo demas, es solo un "pelo de la cola" cuando hablamos de inpactos ambientales realmente dañinos como celco, deforestacion de arboles, daño en la capa de osono, aumento del efecto invernadero, etc etc.
Por lo demas se pueden crear cosas tan buenas con mejoramiento convencional, siendo amigables con el ambiente

made opitz dijo...

¿el impacto de los trángenicos en el medio ambiente, solo un "pelo de la cola"?

Aún no sabemos lo que puede generar esta tecnologia en la salud de las personas y el medio ambiente. No sé si me atreveria a decir que el daño es MENOR, mas bien no lo sabemos aún.

Lo que lo pone en un terreno bastante más peligroso...

Publicar un comentario